viernes, 13 de febrero de 2015

Del dobladillo. Breve reflexión

El dobladillo: amado y odiado.


Hace unas semanas, D La Repubblica publicó un divertido vídeo realizado por los chicos de Relative, definidos por el artículo como una pareja de jóvenes experimentadores sociales que aman divertirse. El vídeo les grababa paseando por las calles de Bolonia, mientras desenrollan literalmente los dobladillos de los pantalones de las personas con las que se encuentran.

Siembre hace unas semanas me he topado con el dibujo de Moderna de Pueblo para la revista Cuore...

... en el que hace un listado de las modas en peligro de extinción, y cita los famosos dobladillos.

Los amados y odiados dobladillos parecen tener una "problemática estética" ya que se los considera como un detalle hipster; todavía, si miramos hacia atrás podemos ver que no los descubrieron exactamente ellos.

Los primeros en introducir el dobladillo en su estética son los Teddy Boys que recuperan el estilo eduardiano (el nombre deriva de hecho del diminutivo de Edward: Teddy) contaminándolo con símbolos y sugestiones propios, por ejemplo, de la estética de los gángsteres de las películas americanas. 

Foto: Momondo

Pero los dobladillos no se paran aquí y pasan por la cultura hard mod, skinhead y punk... de hecho, parece que no nos quieren abandonar.

Por lo tanto, puesto que parecen ser inmortales y que probablemente seguirán en nuestras vidas, he pensado buscar alguna idea bonita para un look "con dobladillo".







Tengo que admitir que a mi el dobladillo no me desagrada, y me parece una solución bastante práctica, de todas formas tenéis que saber que un dobladillo perfecto no es exactamente algo fácil de conseguir.


Aquí tenéis un breve tutorial.

En la fase de enrollado, doblad ligeramente la tela en la parte anterior del pantalón.

Empezando desde el bajo, doblad el pantalón, luego sobreponed un poco de la tela anterior del borde que estáis enrollando (1 cm, más o menos) formando un dobladillo.

Luego, manteniendo este dobladillo con los dedos, enrollad dos veces el borde del pantalón.

El doblado inicial tiene que quedarse en la parte interna de la pierna.


Camicia e Cravatta

De todas maneras, no olvidéis que el dobladillo no tiene que ser perfecto, y para alcanzar su objetivo tiene que ser el reflejo de cierta actitud relajada, sin llegar a ser nunca sinónimo de dejadez.

[¿Quieres leer este post en italiano? Haz clic aquí.]

lunes, 9 de febrero de 2015

La Condesa se sube al ring. #MFShow

La Condesa se sube de nuevo al ring de la moda.


Interbellum es una colección que se inspira en un determinado periodo histórico, que va desde el final de la Primera Guerra Mundial al comienzo de la segunda, y en particular se inspira en dos figuras opuestas: el soldado cansado que vuelve triunfante del frente, y el aristócrata que se ha alistado por honor y regresa trastornado.

El punto de encuentro, un imaginario club de boxeo, donde pueden desahogarse a golpe de guantes.

el contraste entre estos dos mundos se traduce sobre la pasarela en prendas realizadas con elementos y tejidos tan opuestos como terciopelo, lentejuelas, lana abatanada y sarga ruda de algodón.





No falta el estilo military chic, con un estampado camuflaje en sus tonos clásicos: verde caqui.




Pero La Condesa no pierde su toque femenino y de clase y reinterpreta el estampado militar también en tonos lila añadiendo detalles más arty, tanto el las prendas...




... como en las mochilas, que ilumina con una pizca de luz gracias a una base de lúrex.


La chaqueta militar clásica, identidad del brand, sigue siendo uno de los pilares de la marca...





... pero a esta se une una nueva prenda de abrigo: la capa.










Una colección fiel a la trayectoria seguida hasta ahora por La Condesa, pero que evoluciona, gracias también a interesantes colaboraciones, con el colectivo Boa Mistura, por ejemplo, que ha dibujado los exclusivos graffiti impresos sobre los complementos...


... y con Neon Boots, que ha creado para esta colección dos modelos especiales de botinesuno más aristocrático, que combina cuero dorado y terciopelo brocado verde, y otro más rockero, con detalles fucsia y negro sobre una base de lúrex.


Concluyendo: La Condesa se ha subido de nuevo al ring de la moda y, como siempre, no ha defraudado.

[¿Quieres leer este post en italiano? Haz clic aquí.]