Sacando ideas de Coachella...

Coachella significa tres cosas: música, moda y llegada del verano.

Bueno, quizás para la llegada del verano aún hay que esperar, por lo menos aquí en Madrid, ya que el amago de calorcillo ha durado poco, y parece haber vuelto el invierno.

Pero no hay que desesperar. Y para animarnos pensemos en cómo podríamos traer a nuestro día a día algunas ideas, o algún detalle de los looks vistos por Coachella.

Empecemos por un color... el blanco.

Fashion Toast

Kate Bosworth

El total look blanco es todo un clásico del verano. Una camisola de encaje o un vestido blanco para la cuidad son perfectos, lo único que añadiría es quizá un toque denim, como una cazadora...

... o una camisa vaquera.

Jessica Alba

Me gusta la desenvoltura con la que Jessica Alba se anuda la camisa vaquera encima del vestido.

Y el blanco ha sido acompañado por los volantes.

Un trend interesante con un toque hippie que puede mezclarse fácilmente con un look más elegante o más casual.

Mango

Zara

Y para ocasiones más importantes, ¿por qué no elegir un vestido?

Asos

Chloe

También me ha gustado la mezcla de texturas, como ante y encaje. El resultado final tiene un toque boho-chic muy interesante.

Fashion Toast

Y finalmente, en un paralelismo con los festivales hippies del pasado, las coronas de flores han inundado Coachella.

Fashion Toast

http://blog.nastygal.com

Las coronas de flores de las fotos creo que son un poco excesivas para el día a día, pero sí me parecen graciosas las coronas de la marca Cult Gaia, que ofrece diferentes tamaños.

Cult Gaia

Bueno, ahora sólo hay que esperar a que llegue por fin el buen tiempo...

Con el ombligo al aire... o no...

Ha pasado lo que muchas de nosotras no queríamos, o no nos esperábamos.
Ha vuelto el maléfico cropped top, es decir el top corto. Tan corto como para dejar el ombligo al aire.

Algunas revistas lanzan propuestas perfectas para modelos, pero poco probables para nosotras comunes mortales, otras definen este revival una "tendencia delicada", especialmente apta para atrevidas.

Marc Jacobs | PV2013

En las pasarelas los diseñadores lo han propuesto también con faldas o pantalones de talle muy alto, para que el trocito de piel "a la vista" sea del menor tamaño posible... 

Balenciaga | PV2013

Balmain | PV2013

Carven | PV2013

Balenciaga | PV2013

Aun así, considero que se trata de una solución "problemática" en el día a día, ya que, por ejemplo, a la hora de sentarse siempre habrá algún rollito de chicha que intente escaparse, a menos que seáis de las que se sientan siempre perfectamente rectas.

La revista Elle, en su web, sugiere invertir en clases de pilates... Personalmente, creo que podríamos optar por una solución más intermedia, sin tener que matarnos a tablas de abdominales.

Por ejemplo, Chloé sugiere conjuntar el top corto con una camiseta debajo, estilo tank top. El resultado me parece interesante.

Chloé | PV2013

De la misma manera, siempre con un tank top, me parece interesante conjuntar una camiseta como esta...

... corta y con unas lentejuelas que le dan más vidilla.

Otra solución, optar por top cortos "con artimañas", como estos de TopShop:

TopShop

¿Qué os parece? ¿Os vais a animar con unas camisetas cortas?

Elogio a la camiseta blanca

Primero la llevaron los marines y los soldados americanos durante la Primera Guerra Mundial, luego pasó a ser prenda habitual de obreros y campesinos, hasta que de repente llegó al cine, con la película Un tranvía llamado deseo, y llegó su punto de inflexión. La camiseta blanca pasó a ser un must.

Es así, la camiseta blanca es a la moda lo que el perejil a la cocina: va con todo.

Es un básico absolutamente versátil. Puede ser el contrapunto perfecto a prendas más llamativas, como por ejemplo una falda dorada.

También es perfecta para un look más sencillo, aunque no por eso más aburrido.

Hoss Intropia

Otra opción, blazer negro de corte limpio, pantalón de pitillo, también negro, clutch geométrica y stilettos: para un look más agresivo.

Foto: Stockholm Street Style

Una camiseta blanca ofrece además infinitas posibilidades por lo que a accesorios se refiere. Y en vez del clásico collar llamativo, me parece interesante la idea de animar la camiseta con un foulard y un cinturón.

Gustavo Lins

Louis Vuitton
Bueno, aquí falta la camiseta :-)

Creo que llevar un foulard de esta manera, sujetándolo con un cinturón que nos permita "moldearlo" y ajustarlo para crear volumen, puede dar un resultado interesante y un toque diferente a nuestro look "de camiseta blanca". Eso sí, el foulard tiene que ser suficientemente grande como para crear movimiento.

¿Os gusta?

En movimiento. Claves para llevar unos flecos

Parece que los flecos no pasan de moda.
En España se asocian a menudo a una tradición más folclórica, como es el caso de los mantones de Manila...

Bailaora con mantón (s. XIX)

... pero también están fuertemente vinculados al mundo de las Flappers de los años veinte.

Es más, los roaring twenties serán los protagonistas del Festival de Cannes, que se inaugurará con el remake de Baz Luhrmann del clásico de F. Scott Fitzgerald: El Gran Gatsby.

De hecho, en las revistas y en las pasarelas las modelos han lucido diseños con movimiento que reinterpretan perfectamente el estilo de esos maravillosos años veinte.

Elisabetta Franchi

Nina Ricci - PV 2013

Versace - PV 2013

Unos flecos pueden dar un aire divertido a un look más clásico, regalando movimiento a una camisa, una camiseta o un vestido.

Si no os apetece un total look y sois más discretas, os aconsejo los collares de Elva.

Elva

Ondeantes, danzantes y un poco más atrevidos, los collares... 

Begga Design

... y los chalecos de Begga Design.

Begga Design

Y sean largos o cortos, los flecos, alineados y ordenados, esperan sólo un pequeño movimiento para "romper filas" y empezar su danza, hipnótica y divertida.

¿Os animáis a poneros unos?

Enciclopedia Vogue: por qué la moda es también arte e historia

No lo pensamos a menudo cuando nos vamos de compras, pero el proceso que está detrás del "nacimiento" de un vestido empieza con una idea o inspiración, se transforma en dibujo y finalmente se convierte en vestido.

Una entrada que he leído hoy en la Enciclopedia de Vogue me ha hecho pensar en todo el arte y la historia que pueden llegar a mezclarse en la cabeza de un diseñador en el momento de inspirarse.

La ilustración de moda

La moda sin el dibujo es como un vestido sin tela. Los ilustradores fueron los primeros "fotógrafos" de las tendencias, los verdaderos artistas del trazo. La moda vive también de la imagen, y a través de las ilustraciones es posible captar su alma más profunda. La ilustración de moda, entendida como representación de formas de vestir, nace con las representaciones pictóricas o plásticas. Las esculturas, bajorrelieves, cuadros y tapices han sido desde siempre un medio fundamental para el estudio de la evolución del traje. Las tablas tardogóticas de Pisanello, a menudo fruto de su fantasía más que representaciones de la realidad, se consideran unos de los primeros ejemplos de figurines de moda.

Pisanello

Pisanello

En el siglo XVI muchos artistas se dedicaron al estudio de los trajes y perfeccionaron la representación de bordados, drapeados y telas. Pero se trataba de estudios vinculados a la misma obra de arte que no tenían vida propia. El verdadero cambio que daría “independencia” a las ilustraciones de moda surgió con la publicación de tratados sobre trajes, que se divulgaron desde la mitad del siglo XVII y cuyo ejemplo más claro son los aguafuertes de Wenceslaus Hollar.

W. Hollar

[Original: de Barbara LG Sordi para Vogue. Traducción del extracto: Eleonora Montanari. Revisión del extracto: Lidia del Álamo]